Cómo hacer un buen curado de marihuana
Cómo hacer un buen curado de marihuana.
El curado es uno de los procesos más importantes del cultivo. Una vez hayamos conseguido finalizar nuestro cultivo deberemos realizar el secado de nuestra cosecha. Si aún tienes que realizar el secado de tus plantas, te recomendamos que veas nuestro post "¿Cómo secar los cogollos de marihuana?". En el momento que hayamos finalizado el secado llegamos a la parte del curado de nuestros cogollos. Pero ¿de qué hablamos cuando decimos que la marihuana debe de curarse? ¡En nuestro grow shop online te lo contamos todo al detalle!
¿Qué es el curado de marihuana?
En el momento que finaliza el proceso de secado podemos creer que nuestros cogollos están listos para disfrutarlos, pero si queremos sacarle el máximo potencial en cuanto a sabor, aroma y todas las propiedades organolépticas de los cogollos, deberemos curarlos.
Aunque en este momento estés deseando probar tu cosecha, te aseguramos que con un buen curado conseguirás unos resultados increíbles que harán que el proceso y la espera, valga la pena completamente.
¿Por qué curar los cogollos de cannabis?
Aunque tengamos que alargar algunas semanas más el fin de nuestro cultivo, sin duda alguna será compensado.
Cuando creamos que nuestra cosecha pueda estar seca completamente, deberemos estar seguros de que así es, ya que el exterior de nuestros cogollos pueden estar secos, pero en el interior de ellos aún puede restar humedad. Con el curado conseguiremos extraer uniformemente la humedad de los cogollos hacia el exterior, secándolos completamente y mejorando su calidad.
Curar los cogollos de marihuana hará que produzcan un humo suave y delicioso. Con el curado conseguimos una degradación de los productos generados por el secado, como pueden ser los azúcares. Si no lo realizamos, o no lo realizamos correctamente, generaremos un sabor áspero y desagradable en la boca, por lo que, realizando el curado, eliminaremos estos compuestos mejorando el sabor y consiguiendo un humo más suave y agradable.
Mejoraremos el sabor de los cogollos. Con el curado conseguimos la degradación de algunos productos, mientras que a su vez detenemos el progreso de degradación de los compuestos volátiles antes de que se evaporen o se transformen en compuestos menos interesantes, como son el sabor y el aroma. Con ello, no solo acentuáremos el sabor y el aroma, sino que también conseguiremos el máximo potencial psicoactivo del cogollo.
El efecto es más potente. Al no volatilizarse los terpenos y los cannabinoides los niveles de THC permanecen en los cogollos, gracias a ello, se mantiene el máximo THC producido por nuestras plantas.
Al tener nuestros cogollos en unas condiciones óptimas conseguimos alargar el tiempo de conservación, sin perder sabor y potencia. Mientras que además, disminuimos notablemente la aparición de moho debido a que aumenta la resistencia.
¿Cuándo se hace el curado de marihuana?
Cuando tengamos los cogollos secos, recomendamos separar los cogollos de los tallos, de manera que sea mucho más fácil la perdida de humedad, para posteriormente colocarlos en un recipiente.
¿Cómo es el proceso de curado de la marihuana?
Introduciremos los cogollos sin apretarlos, llenando el recipiente hasta el 75% de su capacidad aproximadamente. De esa manera, tendremos un poco de aire en la parte superior del bote y podremos sacudirlo, para que posteriormente pueda salir la humedad. Si vemos que los cogollos se quedan juntos o pegados querrá decir que aún continúan húmedos, por lo que aún deberemos secarlos más.
Cerraremos el recipiente y lo guardaremos en un lugar fresco, seco y oscuro. Al día siguiente los cogollos dejarán de estar secos y crujientes, debido a que la humedad del interior hidrata las partes externas más secas. De esa manera conseguimos extraer la humedad del interior de los cogollos. Si no sucede, quiere decir que los cogollos se han secado demasiado.
Los cogollos deben de estar en el recipiente a una temperatura y una humedad óptima. Guarda los frascos en una habitación o armario con una temperatura de 21ºC. Dentro del recipiente la humedad relativa debería ser del 60 - 65%. Para ello te recomendamos utilizar termohigrometros.
¿Cuánto tiempo abrir los frascos en el curado?
Los primeros días la humedad será más elevada, para descenderla abriremos los recipientes varias veces al día. De esa manera, los cogollos respirarán y extraeremos la humedad. Si los cogollos no están lo suficientemente secos para curarse, las bacterias anaeróbicas los pudrirán. Sabremos que está sucediendo esto cuando en el momento de abrir el recipiente notemos olor a amoníaco. Durante estos días revisaremos los recipientes a menudo, de manera que podamos detectar hongos o moho y eliminar los cogollos cuanto antes. Los primeros días de curado tendremos que abrir las tapas a menudo, renovando el aire. Si la humedad es elevada deberemos de destapar los recipientes al menos unas 2 horas aproximadamente.
A medida que vayan pasando los días la humedad irá disminuyendo, aun así iremos destapando los recipientes al menos una vez al días un par de minutos.
¿Cuanto tiempo tarda en curar la marihuana?
Cuando los cogollos de cannabis llevan 3 semanas en el recipiente, los cogollos estarán curados y listos para fumar (recomendamos un periodo de 4 - 8 semanas según la variedad). Aunque cabe destacar que la calidad de nuestros cogollos seguirá aumentando hasta los 6 meses de curado. En ese momento nuestra marihuana estará en su mejor momento para disfrutar de todas sus propiedades.
Si quieres saber "Cómo conservar la marihuana" te recomendamos que le eches un vistazo a nuestro blog.
Recomendaciones y consejos para el curado de la marihuana.
Proteger la marihuana de la luz.
Uno de los factores más importantes es la luz. Debemos de guardar los cogollos en un lugar oscuro o en un recipiente oscuro, con la finalidad de que la luz no penetre en el interior del frasco. La luz puede provocar una perdida de calidad en nuestros cogollos junto la degradación y la volatilización de los terpenos, el THC y los diferentes cannabinoides que se encuentran en el cannabis. Por ello, para evitar que nuestra cosecha pierda sabor y potencia te recomendamos guardar los cogollos en recipientes oscuros y armarios cerrados.
Evitar altas temperaturas.
De la misma manera que la luz degrada los cannabinoides y flavonoides, el calor también. No sólo debemos proteger nuestros cogollos de la luz si no que el calor también afecta a la perdida de THC, sabor y aroma. Reduciendo la potencia y las propiedades organolépticas de los cogollos. La temperatura ideal para el proceso de curado es de 21ºC.
Controlar la humedad en el curado.
La humedad es el factor principal para un buen curado. Debemos de tener los cogollos en su estado óptimo de secado. No pueden estar demasiado humedos ni demasiado secos. Si los cogollos están muy unidos y pegados significará que aún están humedos, lo sabremos gracias al olor a amoníaco que desprenderán.
Por el contrario, si están demasiado secos los cogollos se romperán con facilidad, y en el momento de querer fumar veremos que se demenuzaran muy facilmente, dejandonos un sabor desagradable y un humo áspero. Puede incluso que nos pique la garganta por culpa de ello.
El cannabis debe de secarse a una humedad entre 45 - 55% para de esa manera se seque el exterior del cogollo y aún conserve humedad en el interior. En el momento del curado la humedad debe establecerse a un nivel óptimo de 60%.
Podemos curar nuestra hierba en diferentes envases, tarros de cristal, botes Tight Vac, cajas de madera... Para ello te recomendamos que veas "Donde se guardan los cogollos de marihuana".